Era inevitable. Algún
día tenía que pasar. Mi afición por colarme en todo parterre a fotografiar la
primera flor que me cruzo para colgarla en las redes sociales tenía que
desembocar en alguien llamándome la atención. Por suerte, en esta ocasión se ha
traducido en descubrir lo que llamo como “un jardín en cualquier rincón” y en
una historia sobre algo verde. El encontrarme con un pequeño jardín rebelde, la
vida de personas que no han querido renunciar a contar con su espacio verde y
de esparcimiento.
Seto de cleome |