7 de julio de 2015

Plazas urbanas y el anhelo de lo natural

Si existe un espacio público en las ciudades que represente de forma acentuada el medio natural más antropizado ese es sin duda la plaza urbana. Lugares que nacen de un anhelo hacia la naturaleza donde ésta siempre quedó doblegada. Era condición sine qua non. Servidumbre impuesta de los hombres que a la vez trataban de romper la estricta monotonía del desarrollo urbanístico con unos lugares de esparcimiento que llevan siglos evolucionando y que le ha llevado a hacer frente a nuevos desafíos. Una redefinición constante de la denominación “lugar público” como un espacio dinámico, habitable y sostenible.

La antigua Alameda de Hércules de Sevilla

Esta evolución hacia un estilo contemporáneo de desarrollo urbano aparece muy marcada en la que podemos considerar la plaza pública más antigua de Europa, la cual conozco bien y no es otra que la Alameda de Hércules de Sevilla. Construida en 1574 bajo la influencia de una nueva corriente de pensamiento universal que con los siglos se llamó Renacimiento, el espacio elegido para dotar a la ciudad sobre palos del primer jardín público, era un terreno que se inundaba con frecuencia debido a las crecidas del Río Guadalquivir, circunstancia que fue solucionada abriendo unas acequias que realizaban funciones drenantes.    

En aquel lugar anteriormente llamado “la laguna”, se colocaron numerosos árboles, principalmente álamos, fuentes y monumentos, entre ellos los dedicados a Hércules. Con el paso del tiempo esta histórica alameda ha sufrido numerosos cambios y obras, el último acontecido hace tan solo siete años, durante el cual se le dio un aspecto estético totalmente moderno integrando las esculturas originales en el diseño moderno actual.  

El pavimento antes de 2008, hasta donde alcanza mi recuerdo, era el típico de albero que abunda en muchos parques y jardines de España, y fue sustituido por otro pavimento con adoquines de hormigón del mismo color albero en gran parte de su superficie. También se realizaron movimientos de tierras de forma que el terreno ha quedado configurado con pequeñas depresiones ondulantes. Pero desde mi punto de vista, el elemento más significativo que se ha introducido, han sido unos surtidores de agua en el suelo que otorgan sensación de frescor a un ambiente de elevada temperatura prolongada durante muchos meses del año. Algunos de los arboles que existían antes de la última restauración se han podido mantener, otros fueron sustituidos por nuevos álamos, olmos o plátanos de sombra que también abundan en la alameda.

El resultado tras cambiar el trazado histórico de una plaza urbana con más de cuatro siglos de antigüedad para conferirle un aspecto tan moderno puede ser más o menos criticable, pero ese no es el cometido de este artículo. Mi intención es la de considerar un cambio de tendencia hacia modelos urbanísticos contemporáneos donde se anhela lo natural. Una ciudad donde lo vegetal ya no queda subordinado al granito y el hormigón. Ahora la naturaleza se encuentra integrada en todo este conjunto.

Otro proyecto más reciente, pues quedó inaugurado en 2002, es The MFO-Park, que se encuentra en Zúrich (Suiza) y es quizás mejor ejemplo de evolución del concepto de plaza urbana contemporánea. Se encuentra ubicada en una antigua zona industrial a la que se le quería dar un nuevo uso como zona de esparcimiento público, siendo necesario para diseñar el proyecto contar con un equipo multidisciplinar. La solución adoptada es una superficie de 6.300 m2 donde dos estructuras metálicas verticales paralelas y dispuestas a distancia homogénea, sobre la que crecen y se desarrollan enredaderas, definen los lados largos de un espacio rectangular. Uno de los lados cortos de este rectángulo vegetal está abierto a la calle, invitando a entrar, a ocuparlo, el otro lado corto conecta los lados largos. Los usuarios pueden acceder a la estructura metálica de la plaza urbana a través de escaleras, llegando a una terraza, pasar después por varías galerías e, incluso, es posible realizar una visual área del espacio inferior desde un voladizo. Este nivel más bajo se encuentra ajardinado y posee el mobiliario urbano, así como, un estanque en forma de media luna. Las trepadoras proporcionan cambio estacional, con caída de hojas, abundante vegetación, y variación de colores a lo largo del año. 

Antiguo o moderno. La tendencia es palpable no solo en viajas plazas urbanas que se remodelan (aunque he de reconocer que el ejemplo de la Alameda de Hércules me viene como anillo al dedo), sino que es fácilmente reconocible en nuevos proyectos que se están ejecutando de plazas urbanas contemporáneas en ciudades de todo el mundo. Nuevos espacios públicos ideados para mejorar el paisaje urbano haciéndolo funcional, práctico, pero sin olvidar que también es un lugar para recuperar de la desafectación patológica del usuario urbanita hacia el medio natural. 

Nuevos surtidores de agua en la Alameda de Hércules de Sevilla
  
Entrada a The MFO-Park en Zúrich
      
Vista aérea de la parte inferior en The MFO-Park en Zúrich
                 
Fuente imágenes: Wikimedia commons 
   
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