Espíritus caminando de noche en el jardín

Se dice que la actividad sobrenatural está asociada a sucesos trágicos en un edificio, por eso las apariciones de espíritus o espectros suelen estar relacionadas con el interior. Pero lo cierto es que un poco más allá, en el jardín, podemos encontrar fantasmas.

Castillo de Malahide 

Imagen de Mark Harrison en flickr

Este es el caso del Castillo de Malahide en Irlanda que se encuentra embrujado por numerosos fantasmas en su interior, pero existe uno en particular que prefiere pulular por el jardín cuando llega la noche.

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El Castillo se encuentra ubicado próximo al pueblo de Malahide, a tan solo 14 kilómetros al norte de Dublín y posee una amplia superficie exterior de zona verde.

La historia del Castillo comienza en 1185 cuando el Rey Enrique II concede las tierras de Malahide a Richard Talbot por servicios a la corona. Desde aquel momento y durante 800 años, la historia de la familia Talbot ha estado entrelazada con la del castillo.

Castillo y jardines de Malahide 

Imagen de Damian Synnott en flickr

No es de extrañar que con tan dilatada existencia sean muchos los sucesos trágicos que han ocurrido en el castillo y que han propiciado el avistamiento de espíritus o fantasmas, cuya relación con el embrujado emplazamiento está tan arraigada como los antiguos bosques circundantes.

Un tema muy recurrente en los fantasmas del Castillo Malahide es el corazón roto como detonante de suceso trágico que lo destina a vagar como alma en pena por el lugar.

Escaleras del castillo que dan al jardín 

Imagen de Zaida Machado en flickr

Puck, el bufón de los Talbot, es el ejemplo más conocido. Puck se enamoró de la hija de Gerald FitzGerald, Lady Eleanor, pariente de los Talbot y que fue confinada en el castillo por su tendencia rebelde contra Enrique VIII, siendo el bufón el encargado de su vigilancia.

Existen varias versiones que apuntan al germen de la tragedia de Puck. Una es que fue rechazado por la dama, otra que se sintió culpable por no cumplir sus deberes de centinela y, finalmente, que los Talbot consideraban a Puck un pretendiente poco apropiado para Lady Eleanor.

Viejo árbol 

Imagen de Kent Wang en flickr

Desafortunado en el amor, apareció apuñalado en el corazón una noche nevada de diciembre en los jardines del castillo. En la actualidad Puck se manifiesta a los visitantes ataviado con su traje de bufón, incluido gorro y cascabeles.

Otro espíritu del Castillo de Malahide, que tiene que ver con el amor es el de Lord Galtrim, Sir Walter Hussey, que murió en batalla el mismo día de su boda y que aparece cada noche gimiendo de dolor y señalándose la herida en el costado que le dio muerte.

Arboleda 

Imagen de wgunther en flickr

Como Lord Galtrim se encontraba de servicio y era buen amigo de los Talbot, pidió a éstos permiso para casarse en Malahide y los propietarios del castillo estuvieron de acuerdo.

La esposa de un solo día de Lord Galtrim, Lady Matilda “Maud” Plunkett, al parecer contrajo segundas nupcias con el responsable de dar muerte a su primer esposo. La casualidad quiso que este segundo matrimonio fuese tan poco duradero como el primero.

Flores del Jardín Botánico Talbot 

Imagen de Kent Wang en flickr

Así pues, Lady Matilda volvió a casarse por tercera vez. En esta ocasión con el Presidente del Tribunal Supremo y cuenta la leyenda que las peleas entre el matrimonio eran frecuentes, siendo Maud la instigadora.

Supuestamente, ella lo perseguía por los pasillos durante las discusiones. Según parece, aún se ve al fantasma de Maud persiguiendo a su atormentado marido por los pasillos de Malahide.

Jardín Botánico Talbot 

Imagen de Kent Wang en flickr

He comentado que los Talbot fueron propietarios del castillo durante 800 años, pero habría que descontar 11 años que la propiedad pasó a ser de Miles Corbett, uno de los “Mata Reyes” que firmaron la sentencia de muerte de Carlos I.

Cuando el monarca fue derrocado a Corbett se le concedió la propiedad de Malahide y se expulsó a los Talbot. Durante esos 11 años de mandato de Corbett parece ser que fue muy odiado por los lugareños.

Mariposario del Jardín Botánico Talbot 

Imagen de Kent Wang en flickr

Pasado este tiempo, se restableció la monarquía y Carlos II persiguió a los “Mata Reyes”. Los Talbot recuperaron Malahide y, aunque al principio Corbett huyó, fue capturado y traído de vuelta al castillo.

Miles Corbett fue ejecutado y ahora se aparece como un espectro ataviado con armadura completa que se desmorona en cuatro piezas.

Bosque de hadas 

Imagen de Kent Wang en flickr

Estos serian los fantasmas que habitan el castillo ¿Qué ocurre con el fantasma del jardín? Este es sin duda el más misterioso de todos de los espíritus de Malahide.

Y es que los jardines de Malahide han estado muy vinculados al castillo y la familia Talbot. Son tan antiguos como el propio castillo y con el paso de los siglos ha adquirido un aspecto mágico o embrujado que favorece su atmósfera feérica.

Invernadero del jardín botánico 

Imagen de Pat en flickr

Incluso los Talbot crearon un jardín botánico en la propiedad. Comprende un espacio amurallado de 1,6 hectáreas que alterna colecciones de plantas con praderas de césped. Cuenta con hasta siete invernaderos y un conservatorio victoriano.

El 7º Lord Talbot de Malahide, a mitad del siglo XX, amplió la colección botánica del jardín y se plantaron especies botánicas procedentes del hemisferio sur, concretamente de Chile y Australia.

Flores en maceta 

Imagen de Pat en flickr

En 1975 la última propietaria Talbot, Rose, vendió al Estado Irlandés el Castillo y toda la superficie verde de Malahide. Hoy en día es un destino turístico muy atractivo, siendo su mayor reclamo la presencia de sus espíritus.

Incluso el bosque antiguo es ahora hogar de hadas y ha sido decorado con diferentes figuras de madera que invitan a los niños a acercarse al mundo mágico. Aunque quizás no son los niños quienes más disfrutan de los jardines, sino el espíritu más misterioso de Malahide.

Existe un cuadro en el castillo que representa una hermosa y desconocida mujer con un vestido blanco. Y los que han visto esta aparición dicen que al llegar media noche la Dama Blanca de Malahide abandona el cuadro para caminar de noche por el jardín.

Iglesia en los terrenos del Castillo de Malahide 

Imagen de William Murphy en flickr

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