2 de junio de 2011

NUEVOS ELEMENTOS EN JARDINERIA. EL “MULCH”

El “Mulch” o acolchado es un elemento relativamente nuevo que se está empleando frecuentemente en paisajismo, ya que proporciona al jardín una serie de ventajas físicas y químicas, sin perder éste su carácter ornamental.
1. Greda volcánica, 2. Gravilla, 3. Corteza de pino
Entre estas ventajas destacamos que al ser sustituto de plantas tapizantes y de césped, se reduce la superficie de riego, lo que supone un ahorro de los recursos hídricos; además con el acolchado se evita la evapotranspiración y se protege al suelo de la sequedad.

También es importante destacar la capacidad del “mulch” para conservar la estructura superficial, protegiendo al suelo de la erosión y previniendo la escorrentía del terreno.
Tipos de acolchados
Existen acolchados naturales como el que se produce bajo un pinar con la caída de las acículas. Este tipo de acolchado de acículas de pinos, llamado orgánico,  se emplea de manera artificial en jardines, siendo excelente para la conservación del agua, aunque también es peligroso por ser inflamable.
Otro tipo de acolchado orgánico es la corteza de pino, muy utilizado en parques y jardines públicos, donde destaca por su color marrón rojizo característico. Es apto para crear un aspecto boscoso en el jardín, siendo recomendable utilizar trozos de pequeños tamaños.
También podemos encontrar materiales inorgánicos, como la grava o gravilla, la greda volcánica y la arcilla expandida, que tienen como ventaja que son muy duraderos y que poseen en muchos casos un gran valor ornamental. Para estos materiales es importante tener en cuenta que los colores pálidos, beige o grises suaves, son preferibles a los blancos, ya que en zonas de mucha irradiación luminosa causan deslumbramientos. Por otro lado con los colores oscuros debemos tener en cuenta que absorben el calor, y por esto provocan un aumento de la temperatura del suelo, siendo más apropiados para climas fríos.
Algunos consejos sobre el extendido de “mulch”   
Al realizar el extendido debemos mantener una capa uniforme de entre 7 y 10 cm de altura, dependiendo del tamaño de la partícula de material utilizado. Cuanto más pequeño es el tamaño del material, más fina ha de ser la capa a aplicar.
En el caso de los acolchados orgánicos debemos realizar un recebado anual, para poder mantener el grosor de la capa extendida. No debemos olvidar colocar un borde de contención para los materiales del acolchado, como pueden ser bordes de madera, ladrillo, metal flexible, etc.
Es muy recomendable, previo al extendido del material que vamos a utilizar, realizar la instalación de una malla antihierbas, que debemos colocar solapando los últimos 15 cm del borde y fijarla al suelo con alambre. De esta manera reduciremos el mantenimiento del jardín ya que evitaremos la aparición de malas hierbas.


Aporta tu opinión en el apartado “comentarios”, al final de este post.

No hay comentarios:

Publicar un comentario