Es cierto que no me
puedo quejar de vivir en una ciudad como Sevilla, pero también es verdad que
presenta algunas carencias entre las que destaca la falta absoluta y total de
un otoño típico. Sí, uno con esas estampas bucólicas de parques y jardines
cubiertos de colores dorados, pardos y rojos. Consulto con avidez mi cuenta de Instagram y observo todos esos hermosos
paisajes urbanos que no están a mi alcance o leo artículos digitales publicados
por revistas especializadas tipo National
Geographic sobre “los cinco paisajes
europeos para recorrer en otoño”… y en esos momentos siento algo de envidia
insana.
Otoño en Parque del Retiro de Madrid |